Fondare 141 Risultati per: enemigo

  • Pero ahora el Señor, mi Dios, me ha permitido vivir en paz sin ningún enemigo y ninguna adversidad. (I Reyes 5, 18)

  • Cuando tu pueblo, Israel, sea derrotado por el enemigo por haber pecado contra ti, si se convierte, te confiesa su pecado, te suplica y te ruega en este templo, (I Reyes 8, 33)

  • Cuando en el país haya hambre, peste, tizón, añublo, langosta o pulgón, si el enemigo los asedia en alguna de sus ciudades; en cualquier plaga o enfermedad, (I Reyes 8, 37)

  • Cuando pequen contra ti -pues no hay hombre que no peque-, y tú, irritado contra ellos, los entregues al enemigo, que los llevará cautivos a tierra enemiga, lejana o cercana; (I Reyes 8, 46)

  • El Señor suscitó a Salomón un enemigo en Hadad, un idumeo de la estirpe real de Edón. (I Reyes 11, 14)

  • Dios suscitó también otro enemigo a Salomón en Rezón, hijo de Elyadá, que había huido de su amo Hadadézer, rey de Sobá. (I Reyes 11, 23)

  • fue enemigo de Israel durante todo el reinado de Salomón. Hadad reinó en Edón y fue también enemigo de Salomón. (I Reyes 11, 25)

  • Ajab dijo a Elías: "¿Así que me has sorprendido, enemigo mío?". "Sí, te he sorprendido -respondió Elías-; por haberte prestado a hacer lo que es malo a los ojos del Señor, (I Reyes 21, 20)

  • Cuando tu pueblo Israel sea derrotado por el enemigo por haber pecado contra ti, si se convierte, te confiesa su pecado, te suplica y te ruega en este templo, (II Crónicas 6, 24)

  • Cuando en el país haya hambre, peste, tizón, añublo, langosta o pulgón, o el enemigo del pueblo asedie una de sus ciudades, o cuando hubiere cualquier otra plaga o epidemia, (II Crónicas 6, 28)

  • Cuando pequen contra ti, pues no hay hombre que no peque, y tú, irritado contra ellos, los entregues al enemigo que los llevará cautivos a tierra enemiga, lejana o cercana, (II Crónicas 6, 36)

  • pues yo y mi pueblo estamos condenados al exterminio, a la matanza, al aniquilamiento. Si al menos se hubiese tratado de vendernos como esclavos o esclavas, callaría; pero el enemigo no podrá compensar los daños al rey". (Ester 7, 4)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina