9. Llegó a Jerusalén, y fue recibido amigablemente por el sumo sacerdote y por la ciudad; informó de la denuncia recibida, y preguntó si las cosas eran así en realidad.





“Padre Pio disse a um filho espiritual: Trabalhe! Ele perguntou: No que devo trabalhar, Padre? Ele respondeu: Em amar sempre mais a Jesus!” São Padre Pio de Pietrelcina