28. Y les dije: "Vosotros estáis consagrados al Señor, y sagrados son también estos utensilios; esta plata y este oro son una ofrenda voluntaria al Señor, Dios de nuestros padres.





“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina