8. Baja, pues, delante de mí a Guilgal y yo iré a juntarme contigo para ofrecer víctimas y sacrificios a Yavé. Esperarás siete días, hasta que yo venga a ti y te diga lo que debes hacer.»





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina