21. Los hijos de Israel que estaban en Jerusalén celebraron la fiesta de los Azimos por siete días con gran alegría, mientras los levitas y los sacerdotes alababan a Yavé todos los días con todas sus fuerzas.





“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina