17. Los de Judá y sus hermanos de la tribu de Simeón atacaron a los cananeos que habitaban en Sefat y sacrificaron la ciudad en honor de Yavé. Por esto, la ciudad se llamó «Anatema».





“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina