Znaleziono 79 Wyniki dla: arco y flecha

  • Luego mandaré a mi muchacho a buscarlas diciéndole: Anda a buscar la flecha. Si digo al joven: La flecha está más acá, tómala; entonces, vienes tú, ya que es señal de que no hay nada que temer y, ¡vive Yavé!, que estás seguro. (1 Samuel 20, 21)

  • Pero si digo al joven: La flecha está más allá, márchate, ya que es la voluntad de Yavé. (1 Samuel 20, 22)

  • Cuando el muchacho llegaba al lugar de la primera flecha que había lanzado, Jonatán le gritó: «Mira, allí delante de ti está la flecha.» (1 Samuel 20, 37)

  • Y siguió gritando: «Pronto, apúrate, no te detengas.» El joven tomó la flecha y volvió donde su señor. (1 Samuel 20, 38)

  • y ordenó enseñarlo a los hijos de Judá (es el canto del Arco y está escrito en el libro del Justo): (2 Samuel 1, 18)

  • El escudo de Saúl no estaba ungido con aceite sino con la sangre de los heridos y con la grasa de los guerreros.El arco de Jonatán no retrocedió jamás ni la espada de Saúl se blandía en vano. (2 Samuel 1, 22)

  • El adiestra mis manos para el combate y mis brazos para estirar el arco de bronce. (2 Samuel 22, 35)

  • En esos momentos, uno de los arameos disparó una flecha sin saber a quién apuntaba e hirió al rey de Israel entre la parte alta y la parte baja de su coraza. Este dijo al conductor de su carro: «Da la vuelta con las riendas y sácame de aquí, pues no me siento bien.» (1 Reyes 22, 34)

  • El le respondió: «Si no matas a los que apresas con espada y con arco, ¿cómo matarías a éstos? Dales pan y agua para que coman y beban y, luego, vuelvan a su señor.» (2 Reyes 6, 22)

  • Jehú había tendido su arco y le disparó a Joram una flecha que, entrando por la espalda, le atravesó el corazón. Y Joram cayó muerto en su carro. (2 Reyes 9, 24)

  • Eliseo le dijo: «Toma un arco y flechas.» El tomó el arco y flechas. (2 Reyes 13, 15)

  • Dijo Eliseo al rey: «Pon tu mano sobre el arco». Y éste puso su mano. Entonces Eliseo colocó su mano sobre la mano del rey (2 Reyes 13, 16)


“Se quisermos colher é necessário não só semear, mas espalhar as sementes num bom campo. Quando as sementes se tornarem plantas, devemos cuidá-las para que as novas plantas não sejam sufocadas pelas ervas daninhas.” São Padre Pio de Pietrelcina