Znaleziono 933 Wyniki dla: caída de Jerusalén

  • David le dijo entonces: «Bueno, quédate aquí por hoy y mañana te despediré.» Así, pues, Urías se quedó aquel día en Jerusalén. (2 Samuel 11, 12)

  • En cuanto a sus habitantes, los hizo salir de la ciudad, los puso a manejar la sierra, las rastras y las hachas de hierro y los hizo trabajar en la fabricación de ladrillos; lo mismo hizo con todas las ciudades de los amonitas. Y luego Da vid y todo su ejército volvieron a Jerusalén. (2 Samuel 12, 31)

  • Joab se encaminó hacia Guesur e hizo venir a Absalón a Jerusalén. (2 Samuel 14, 23)

  • Absalón permaneció dos años en Jerusalén sin ver al rey. (2 Samuel 14, 28)

  • pues cuando estaba en Guesur, en Aram, hice este voto: Si Yavé me hace volver a Jerusalén, le ofreceré un sacrificio en Hebrón.» (2 Samuel 15, 8)

  • Había salido de Jerusalén con doscientos hombres invitados por él, que lo acompañaban sin saber lo que tramaba. (2 Samuel 15, 11)

  • dijo a todos sus servidores que estaban con él en Jerusalén: «Huyamos luego, porque no podemos resistir a Absalón. Salgamos sin demora, no sea que nos ataque de repente, nos inflija una derrota y pase la ciudad a cuchillo.» (2 Samuel 15, 14)

  • Tú y tu hijo Ajimás, junto con Abiatar y su hijo Jonatán, vuelvan en paz a Jerusalén. (2 Samuel 15, 27)

  • Entonces, Sadoc y Abiatar volvieron con el Arca a Jerusalén y se quedaron allí. (2 Samuel 15, 29)

  • Jusay, amigo de David, entró en la ciudad, en el momento en que Absalón llegaba a Jerusalén. (2 Samuel 15, 37)

  • El rey preguntó: «¿Dónde está el hijo de tu señor?» Sibá respondió: «Se quedó en Jerusalén, pues se dijo: Hoy la gente de Israel me devolverá el reino de mi padre.» (2 Samuel 16, 3)

  • Absalón, acompañado de Ajitofel, entró con todos los hombres de Israel en Jerusalén. (2 Samuel 16, 15)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina