Znaleziono 267 Wyniki dla: campo

  • Pero cuando llegaron al campo de los israelitas, éstos les hicieron frente y derrotaron a los moabitas, que huyeron delante de ellos. Los israelitas entraron en Moab persiguiéndolos. (2 Reyes 3, 24)

  • Uno de ellos salió al campo para recoger verduras; halló una planta silvestre y tomó de ella frutas venenosas hasta llenar su capa. Cuando estuvo de vuelta las cortó en pedazos en la olla donde se preparaba el caldo, pues no sabía lo que era. (2 Reyes 4, 39)

  • El rey se levantó de noche y dijo a sus oficiales: «Los arameos saben que estamos hambrientos. Han salido del campamento y se han escondido en el campo, esperando que salgamos de la ciudad para tomarnos vivos y, después, entrar aquí. » (2 Reyes 7, 12)

  • En cuanto a Jezabel, nadie la sepultará y los perros la devorarán en el campo de Jezrael.» El joven abrió la puerta y huyó. (2 Reyes 9, 10)

  • Joram entonces dijo: «Que enganchen los caballos de mi carro.» Y salió Joram, rey de Israel, con Ocozías, rey de Judá, cada uno en su carro, partiendo al encuentro de Jehú. Lo encontraron en el campo de Nabot, el de Jezrael. (2 Reyes 9, 21)

  • Jehú dijo a su escudero Bidqar: «Tómalo y tira el cadáver en el campo de Nabot de Jezrael; porque recuerda que cuando servíamos juntos en la caballería de su padre, Ajab, Yavé pronunció contra él esta sentencia: (2 Reyes 9, 25)

  • Yo juro que en este campo tomaré venganza en ti, por la sangre de Nabot y por la sangre de sus hijos, que ayer te vi derramar. Así que llévalo y arrójalo en el campo, según la palabra de Yavé.» (2 Reyes 9, 26)

  • Cuando avisaron a Jehú, dijo: «Es lo que Elías de Tisbé había dicho de parte de Yavé: En el campo de Jezrael, los perros comerán la carne de Jezabel. (2 Reyes 9, 36)

  • El rey de Asur mandó desde Laquis a uno de sus generales con una numerosa tropa para que encontraran a Ezequías. Subió a Jerusalén, y se detuvo en el canal del estanque superior, que está junto al camino del Campo del Batanero. (2 Reyes 18, 17)

  • Sus habitantes, de débiles manos, confusos y aterrados, no podían hacer nada. Fueron como hierba del campo, hierba de tejado, pasto quemado por el viento de oriente. (2 Reyes 19, 26)

  • pero el campo de la ciudad y sus aldeas se dieron a Caleb, hijo de Jefunné. (1 Crónicas 6, 41)

  • Que resuene el mar y cuanto lo llena. Alégrese el campo y todo lo que en él vive. (1 Crónicas 16, 32)


Como distinguir uma tentação de um pecado e como estar certo de que não se pecou? – perguntou um penitente. Padre Pio sorriu e respondeu: “Como se distingue um burro de um homem? O burro tem de ser conduzido; o homem conduz a si mesmo!” São Padre Pio de Pietrelcina