Znaleziono 246 Wyniki dla: haré

  • Haré a tus gobernantes como eran antes, y a tus consejeros como en otros tiempos. Entonces te llamarán Ciudad Fiel, Lugar de la Justicia. (Isaías 1, 26)

  • Haré que los hombres sean más escasos que el oro fino y más difíciles de hallar que el oro de Ofir.» (Isaías 13, 12)

  • Entonces mis pobres se alimentarán de mis campos y los que nada tienen dormirán tranquilos, mientras que a tus hijos los haré morir de hambre y mataré a los sobrevivientes.» (Isaías 14, 30)

  • - «Yo me quedo sin cerca, ¿y de dónde me vienen esas malezas?» - «Yo mismo les haré la guerra y a todos les prenderé fuego; (Isaías 27, 4)

  • Te has levantado contra mí y tus palabras insolentes han llegado a mis oídos; por eso voy a poner un anillo en tus narices y un freno en tus labios, y te haré volver por el camino por donde has venido.» (Isaías 37, 29)

  • Haré brotar ríos en los cerros pelados y vertientes en medio de los valles. Convertiré el desierto en lagunas y la tierra seca en manantiales. (Isaías 41, 18)

  • Haré andar a los ciegos por el camino desconocido y los guiaré por los senderos. Cambiaré ante ellos las tinieblas en luz y los caminos de piedras en pistas pavimentadas. Todo esto es lo que que voy a hacer, y lo haré sin falta. (Isaías 42, 16)

  • No temas, pues, ya que yo estoy contigo. Del Este haré venir a tu descendencia y del Oeste te reuniré. (Isaías 43, 5)

  • Llamo desde el Este a un ave de rapiña, llamo de una tierra lejana, al hombre que está en mis proyectos. Tal como lo he pensado, así lo haré; como lo he planeado, así lo ejecutaré. (Isaías 46, 11)

  • Haré caminos a través de las montañas y pavimentaré los senderos.. (Isaías 49, 11)

  • A tus opresores los haré comer su propia carne. y se emborracharán con su sangre como si fuese vino. Y todo mortal sabrá que yo, Yavé, soy tu Salvador y que tu Redentor es el Campeón de Jacob. (Isaías 49, 26)

  • Haré tus murallas de rubíes, tus puertas de cristal, y todo tu contorno de piedras preciosas. (Isaías 54, 12)


“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina