Znaleziono 56 Wyniki dla: huyeron

  • Pero cuando llegaron al campo de los israelitas, éstos les hicieron frente y derrotaron a los moabitas, que huyeron delante de ellos. Los israelitas entraron en Moab persiguiéndolos. (2 Reyes 3, 24)

  • Judá fue derrotado por Israel y huyeron cada uno a su casa. (2 Reyes 14, 12)

  • Entonces hicieron una abertura en el muro de la ciudad, y todos los hombres de guerra huyeron de noche por el camino de la puerta entre los dos muros de la quinta del rey, pasando a través de los caldeos, y se fueron por el camino de la estepa. (2 Reyes 25, 4)

  • Entonces todo el pueblo, desde el más pequeño al más grande y los jefes del ejército, huyeron a Egipto por temor de los caldeos. (2 Reyes 25, 26)

  • Los filisteos pelearon contra Israel; huyeron los hombres de Israel ante los filisteos, y cayeron heridos de muerte en el monte Gelboé. (1 Crónicas 10, 1)

  • Todos los hombres de Israel, que estaban en el valle, vieron que las tropas de Israel se daban a la fuga y que Saúl y sus hijos habían muerto. Entonces abandonaron sus ciudades y huyeron; vinieron los filisteos y se establecieron en ellas. (1 Crónicas 10, 7)

  • Joab avanzó con su ejército para luchar contra los arameos, que huyeron delante de él. (1 Crónicas 19, 14)

  • Viendo los amonitas que los arameos emprendían la fuga, huyeron también ellos ante Abisay, hermano de Joab, y volvieron a la ciudad, mientras que Joab regresó a Jerusalén. (1 Crónicas 19, 15)

  • Los arameos huyeron ante Israel: David mató a siete mil soldados de infantería de los carros y a cuarenta mil de infantería. Mató también a Sofac, jefe del ejército. (1 Crónicas 19, 18)

  • Huyeron los hijos de Israel delante de Judá, y Dios los entregó en sus manos. (2 Crónicas 13, 16)

  • Los de Judá fueron derrotados por Israel y huyeron cada uno a su casa. (2 Crónicas 25, 22)

  • No habían pasado cuarenta días, cuando el rey fue muerto por sus dos hijos, que huyeron a las montañas de Ararat. (Tobías 1, 21)


“Que Jesus o aperte sempre mais ao Seu divino coração. Que Ele o alivie no sofrimento e lhe dê o abraço final no Paraíso.” São Padre Pio de Pietrelcina