Znaleziono 539 Wyniki dla: mujer vestida de sol

  • Si una mujer ha recibido una formación realmente religiosa, las buenas obras han de ser sus adornos. (1º Carta a Timoteo 2, 10)

  • Que la mujer sea sumisa y sepa aprender en vez de molestar. (1º Carta a Timoteo 2, 11)

  • No permito que la mujer enseñe ni que quiera corregir a su marido; que se quede tranquila, (1º Carta a Timoteo 2, 12)

  • Y no fue Adán el que se dejó engañar, sino la mujer, y por ella vino la desobediencia. (1º Carta a Timoteo 2, 14)

  • Si alguna mujer creyente tiene viudas en su familia, que las atienda. Así la Iglesia no tendrá que cargar con ellas y podrá socorrer a las que son viudas en el justo sentido. (1º Carta a Timoteo 5, 16)

  • No pueden ver a una mujer sin desearla, no se cansan de pecar y de seducir a las almas poco firmes. Son gente maldita, que tienen el corazón ejercitado en la codicia. (2º Carta de Pedro 2, 14)

  • Pero tengo contra ti que dejas actuar a tu Jezabel, esa mujer que se llama a sí misma profetisa, que enseña a mis servidores y los hace descarriar, pues se prostituyen y comen carnes sacrificadas a los ídolos. (Apocalipsis 2, 20)

  • sus cabellos son como los de mujer y sus dientes como los de leones. (Apocalipsis 9, 8)

  • Apareció en el cielo una señal grandiosa: una mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza. (Apocalipsis 12, 1)

  • con su cola barre la tercera parte de las estrellas del cielo, precipitándolas sobre la tierra. El dragón se detuvo delante de la mujer que iba a dar a luz, para devorar a su hijo en cuanto naciera. (Apocalipsis 12, 4)

  • Y la mujer dio a luz un hijo varón, el que ha de gobernar a todas las naciones con vara de hierro; pero su hijo fue arrebatado y llevado ante Dios y su trono, (Apocalipsis 12, 5)

  • mientras la mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar que Dios le ha preparado. Allí la alimentarán durante mil doscientos sesenta días. (Apocalipsis 12, 6)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina