Znaleziono 106 Wyniki dla: prójimo

  • Mientras no hayan recibido, besarán las manos del pròjimo, se harán los humildes pensando en lo que él tiene; pero en el momento de la devoluciòn le piden una pròrroga, o le pagan con palabras hirientes, o se quejan de la mala situación. (Sirácides (Eclesiástico) 29, 5)

  • Sé sin embargo generoso con el prójimo, no lo dejes esperando tu limosna. (Sirácides (Eclesiástico) 29, 8)

  • El hombre de bien sirve de aval a su prójimo; tendría que haber perdido toda la vergüenza para abandonarlo. (Sirácides (Eclesiástico) 29, 14)

  • Acude en ayuda de tu prójimo en la medida de tus posibilidades, pero trata de no caerte. (Sirácides (Eclesiástico) 29, 20)

  • Mata a su prójimo el que le quita los medios para sobrevivir; retener el salario de un trabajador es lo mismo que derramar su sangre. (Sirácides (Eclesiástico) 34, 22)

  • No cometerán el mal, ni dañarán a su prójimo en todo mi Cerro santo, pues, como llenan las aguas el mar, se llenará la tierra del conocimiento de Yavé. (Isaías 11, 9)

  • Son potros satisfechos y lozanos que relinchan por la mujer de su prójimo. (Jeremías 5, 8)

  • Ustedes roban, matan, toman la esposa del prójimo, juran en falso u ofrecen sacrificios a otros dioses, que no son de ustedes... (Jeremías 7, 9)

  • Su lengua es una flecha que mata, diciendo mentiras; le desean al prójimo la paz, pero, en su corazón, le preparan una trampa. (Jeremías 9, 7)

  • ¡Pobre de aquel que edifica su casa con abusos, y levanta sus pisos sobre la injusticia! ¡Pobre de aquel que se aprovecha de su prójimo y lo hace trabajar sin pagarle su salario! (Jeremías 22, 13)

  • Por lo tanto, así dice Yavé: «Ustedes no me han escuchado al no conceder la libertad a su prójimo. Pues bien, voy a dejar libres contra ustedes a la espada, a la peste y al hambre, y llegarán a ser un ejemplo espantoso para todas las naciones de la tierra. (Jeremías 34, 17)

  • no come la carne no desangrada, no vuelve sus ojos hacia los sucios ídolos de la casa de Israel, no ensucia a la mujer de su prójimo ni se acerca a una mujer durante su regla; no oprime a nadie, devuelve la garantía al que le debía, no comete robos, da su pan al que tiene hambre y le pone ropa al que está desnudo; no presta su dinero con interés, no cobra comisiones, aparta su mano de la injusticia, juzga conforme a la verdad cualquier problema entre un hombre y su prójimo; (Ezequiel 18, 6)


“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina