Znaleziono 12 Wyniki dla: sanar

  • Te herirá Yavé con las úlceras y plagas de Egipto, con tumores, sarna y tiña, de las que no podrás sanar. (Deuteronomio 28, 27)

  • Yavé te herirá con úlceras malignísimas en las rodillas y en las piernas, de las que no podrás sanar, desde la planta de los pies hasta la coronilla de tu cabeza. (Deuteronomio 28, 35)

  • Ezequías dijo a Isaías: «¿Cuál será la señal de que Yavé me va a sanar y que dentro de tres días subiré a la Casa de Yavé?» (2 Reyes 20, 8)

  • porque aquellos que se jactaban de sanar a los espíritus de sus perturbaciones y de sus temores, eran presa de un miedo ridículo. (Sabiduría 17, 8)

  • La mejoría viene del Altísimo, y es el Rey quien concede el don de sanar. (Sirácides (Eclesiástico) 38, 2)

  • haré que les brote la risa de sus labios: ¡Paz, paz al que está lejos y al que está cerca!, dice Yavé. Sí, yo te voy a sanar.» (Isaías 57, 19)

  • ¡El Espíritu del Señor Yavé está sobre mí! sepan que Yavé me ha ungido. Me ha enviado con un buen mensaje para los humildes, para sanar los corazones heridos, para anunciar a los desterrados su liberación, y a los presos su vuelta a la luz. (Isaías 61, 1)

  • «¡Vuelvan, hijos rebeldes, que los voy a sanar de su rebelión!» «Aquí estamos de vuelta junto a ti, porque tú eres Yavé, nuestro Dios. (Jeremías 3, 22)

  • Ya que a ti te llamaban La Abandonada, nuestra presa, de quien nadie se preocupa, yo voy a devolver el vigor a tu cuerpo y voy a sanar tus llagas, dice Yavé. (Jeremías 30, 17)

  • Pues al verlo sanar a tantos, todas las personas que sufrían de algún mal se le echaban encima para tocarlo. (Evangelio según San Marcos 3, 10)

  • Al saber que Jesús había vuelto de Judea a Galilea, salió a su encuentro para pedirle que fuera a sanar a su hijo, que se estaba muriendo. (Evangelio según San Juan 4, 47)

  • Jesús lo vio tendido, y cuando se enteró del mucho tiempo que estaba allí, le dijo: «¿Quieres sanar?» (Evangelio según San Juan 5, 6)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina