Znaleziono 487 Wyniki dla: Espíritu

  • En ella hay un espíritu inteligente, santo, único, multiforme, sutil, ágil, perspicaz, sin mancha, diáfano, inalterable, amante del bien, agudo, (Sabiduría 7, 22)

  • para que gobernara el mundo con santidad y justicia e hiciera justicia con rectitud de espíritu: (Sabiduría 9, 3)

  • ¿Y quién habría conocido tu voluntad si tú mismo no hubieras dado la Sabiduría y enviado desde lo alto tu santo espíritu? (Sabiduría 9, 17)

  • porque tu espíritu incorruptible está en todas las cosas. (Sabiduría 12, 1)

  • El hombre, en su malicia, puede matar, pero no hace volver el espíritu una vez que se fue, ni libera al alma recibida por el Abismo. (Sabiduría 16, 14)

  • El que se confía demasiado pronto, es un espíritu frívolo, y el que peca, se perjudica a sí mismo. (Eclesiástico 19, 4)

  • El espíritu de los que temen al Señor vivirá, porque han puesto su esperanza en aquel que los salva. (Eclesiástico 34, 13)

  • Ya que el muerto descansa, deja en paz su memoria, y trata de consolarte, porque ha partido su espíritu. (Eclesiástico 38, 23)

  • Si el gran Señor así lo desea, será colmado del espíritu de inteligencia: derramará como lluvia sus sabias palabras y celebrará al Señor con su plegaria; (Eclesiástico 39, 6)

  • Como bandada de pájaros, él esparce la nieve y, al bajar, ella se posa como la langosta; el resplandor de su blancura deslumbra los ojos y el espíritu se embelesa al verla caer. (Eclesiástico 43, 18)

  • Pinjás, hijo de Eleazar, fue el tercero en gloria, a causa de su celo en el temor del Señor, y porque se mantuvo firme frente a la rebelión del pueblo, con el generoso ardor de su espíritu: fue así como expió el pecado de Israel. (Eclesiástico 45, 23)

  • Cuando Elías fue llevado en un torbellino, Eliseo quedó lleno de su espíritu. Durante su vida ningún jefe lo hizo temblar, y nadie pudo someterlo. (Eclesiástico 48, 12)


“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina