Znaleziono 18 Wyniki dla: Perro
Pero contra los israelitas -ya sean hombres o animales- ni siquiera ladrará un perro, para que ustedes sepan que el Señor hace una distinción entre Israel y Egipto’. (Exodo 11, 7)
No llevarás a la Casa del Señor, tu Dios, la paga de una prostituta ni el salario de un perro, cualquiera sea el voto que hayas hecho: porque ambos son una abominación para el Señor, tu Dios. (Deuteronomio 23, 19)
Entonces dijo a David: "¿Soy yo un perro para que vengas a mí armado de palos?". Y maldijo a David invocando a sus dioses. (I Samuel 17, 43)
¿Detrás de quién ha salido el rey de Israel? ¿A quién estás persiguiendo? ¡A un perro muerto! ¡A una pulga! (I Samuel 24, 15)
Abner se enfureció por las palabras de Isbaal y replicó: "¿Acaso yo soy un perro, de esos de Judá? Hasta hoy he procedido lealmente con la casa de tu padre Saúl, con sus hermanos y amigos, y no te dejé caer en manos de David. ¡Y ahora tú me recriminas a causa de esa mujer! (II Samuel 3, 8)
Meribaal se postró y dijo: "¿Quién es tu servidor, para que te fijes en un perro muerto como yo?". (II Samuel 9, 8)
Abisai, hijo de Seruiá, dijo al rey: "¿Cómo ese perro muerto va a maldecir a mi señor, el rey? ¡Deja que me cruce y le cortaré la cabeza!". (II Samuel 16, 9)
Jazael replicó: "Tu servidor no es más que un perro. ¿Cómo va a hacer tales hazañas?". Eliseo respondió: "El Señor me ha hecho ver que tú reinarás sobre Arám". (II Reyes 8, 13)
El joven partió con el ángel, y el perro los seguía. Caminaron los dos y, al llegar la primera noche, acamparon a orillas del río Tigris. (Tobías 6, 1)
Los dos siguieron caminando juntos, y el ángel le recomendó a Tobías que tuviera a mano la hiel. El perro iba detrás de ellos. (Tobías 11, 4)
Luego te conduciré a través de la Judea hasta las puertas de Jerusalén, y pondré tu sitial en medio de ella. Tú los conducirás como a ovejas que no tienen pastor, y ni siquiera un perro se atreverá a ladrar ante ti. Todas estas cosas me fueron comunicadas anticipadamente, y yo he sido enviada a anunciártelas". (Judit 11, 19)
Libra mi cuello de la espada y mi vida de las garras del perro. (Salmos 22, 21)