Znaleziono 516 Wyniki dla: obras de la carne

  • Se sabe muy bien cuáles son las obras de la carne: fornicación, impureza y libertinaje, (Gálatas 5, 19)

  • porque los que pertenecen a Cristo Jesús han crucificado la carne con sus pasiones y sus malos deseos. (Gálatas 5, 24)

  • el que siembra para satisfacer su carne, de la carne recogerá sólo la corrupción; y el que siembra según el Espíritu, del Espíritu recogerá la Vida eterna. (Gálatas 6, 8)

  • Todos nosotros también nos comportábamos así en otro tiempo, viviendo conforme a nuestros deseos carnales y satisfaciendo las apetencias de la carne y nuestras malas inclinaciones, de manera que por nuestra condición estábamos condenados a la ira, igual que los demás. (Efesios 2, 3)

  • y no es el resultado de las obras, para que nadie se gloríe. (Efesios 2, 9)

  • Nosotros somos creación suya: fuimos creados en Cristo Jesús, a fin de realizar aquellas buenas obras, que Dios preparó de antemano para que las practicáramos. (Efesios 2, 10)

  • Por eso, recuerden lo que ustedes eran antes: paganos de nacimiento, llamados «incircuncisos» por aquellos que se dicen «circuncisos», en virtud de un corte practicado en la carne. (Efesios 2, 11)

  • y aboliendo en su propia carne la Ley con sus mandamientos y prescripciones. Así creó con los dos pueblos un solo Hombre nuevo en su propia persona, restableciendo la paz, (Efesios 2, 15)

  • y no participen de las obras estériles de las tinieblas; al contrario, pónganlas en evidencia. (Efesios 5, 11)

  • Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su mujer, y los dos serán una sola carne. (Efesios 5, 31)

  • Porque nuestra lucha no es contra enemigos de carne y sangre, sino contra los Principados y Potestades, contra los Soberanos de este mundo de tinieblas, contra los espíritus del mal que habitan en el espacio. (Efesios 6, 12)

  • Porque los verdaderos circuncisos somos nosotros, los que ofrecemos un culto inspirado en el Espíritu de Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, en lugar de poner nuestra confianza en la carne, aunque yo también tengo motivos para poner mi confianza en ella. (Filipenses 3, 3)


“Caminhe com alegria e com o coração o mais sincero e aberto que puder. E quando não conseguir manter esta santa alegria, ao menos não perca nunca o valor e a confiança em Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina