Znaleziono 516 Wyniki dla: obras de la carne

  • Después la vaca será quemada a la vista de él: se deberá quemar el cuero, la carne, la sangre, e incluso los excrementos. (Números 19, 5)

  • "Señor, tú que has comenzado a mostrar a tu servidor tu grandeza y tu mano poderosa, porque no hay ningún dios en el cielo o en la tierra capaz de realizar las obras y los portentos que tú realizas: (Deuteronomio 3, 24)

  • los signos y las obras que realizó en Egipto contra el Faraón, rey de Egipto, y contra todo su país; (Deuteronomio 11, 3)

  • Sin embargo, podrás matar animales y comer carne en cualquiera de tus ciudades, siempre que así lo desees y en la medida en que el Señor, tu Dios, te bendiga. Podrán comerla igualmente el impuro y el puro, como si se tratara de un ciervo o de una gacela. (Deuteronomio 12, 15)

  • Cuando el Señor, tu Dios, ensanche tus fronteras, como te lo ha prometido, y sientas deseos de comer carne, podrás comer toda la que quieras. (Deuteronomio 12, 20)

  • sólo tendrás que abstenerte de comer la sangre, porque la sangre es la vida, y tú no debes comer la vida junto con la carne. (Deuteronomio 12, 23)

  • Allí harás el holocausto de la carne y de la sangre sobre el altar del Señor, tu Dios. En cuanto a tus sacrificios, la sangre será derramada sobre el altar del Señor, tu Dios, y tú comerás la carne. (Deuteronomio 12, 27)

  • Tampoco comerán cerdo, porque aunque tiene la pezuña partida, no es rumiante. También a este deberán considerarlo impuro, y no podrán comer su carne ni tocar su cadáver. (Deuteronomio 14, 8)

  • Cuando le des algo, lo harás de buena gana. Así el Señor te bendecirá en todas tus obras y en todas las empresas que realices. (Deuteronomio 15, 10)

  • Esos siete días la levadura no deberá verse en todo tu territorio, y tampoco quedarán para el día siguiente restos de la carne sacrificada al atardecer del primer día. (Deuteronomio 16, 4)

  • Siete días estarás de fiesta en honor del Señor, tu Dios, en el lugar que él elija. Porque el Señor, tu Dios, te bendecirá en todas tus cosechas y en todas tus obras, para que seas plenamente feliz. (Deuteronomio 16, 15)

  • Y durante el asedio, será tal la penuria a que te reducirá tu enemigo, que te comerás hasta el fruto de tus entrañas, la carne de tus hijos y de tus hijas, los mismos que el Señor, tu Dios, te había dado. (Deuteronomio 28, 53)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina