Znaleziono 65 Wyniki dla: querido
Pero Esaú añadió: "Ya tengo bastante, querido hermano. Quédate con lo que es tuyo". (Génesis 33, 9)
Es como lo acabo de decir al Faraón: Dios ha querido mostrarle lo que está a punto de realizar. (Génesis 41, 28)
y háblale en estos términos: ‘El Señor, el Dios de los hebreos, me envió a decirte: Deja que mi pueblo vaya a rendirme culto en el desierto. Pero tú no has querido obedecer. (Exodo 7, 16)
La mujer se puso a llorar en brazos de Sansón, y le dijo: "Tú no sientes ningún cariño por mí. Has propuesto una adivinanza a mis compatriotas, y no has querido darme la solución". "No se la di a mi padre ni a mi madre, le respondió él, ¿y te la voy a dar a ti?". (Jueces 14, 16)
No, el Señor no rechazará a su pueblo, por el honor de su gran Nombre, porque él ha querido hacer de ustedes su pueblo. (I Samuel 12, 22)
¡Cuánto dolor siento por ti, Jonatán, hermano mío muy querido! Tu amistad era para mí más maravillosa que el amor de las mujeres. (II Samuel 1, 26)
Tal vez esta decisión provenga de mi señor el rey, sin que tú hayas querido hacer saber a tus servidores quién se sentaría en el trono de mi señor el rey, después de él". (I Reyes 1, 27)
Tobit le dijo: "¡Bienvenido, hermano, y salud! No tomes a mal que haya querido conocer la verdad acerca de tu familia. Por lo visto, eres un hermano de respetable y noble origen. Conozco a Ananías y a Natán, los dos hijos de Semeías el Grande. Ellos me acompañaban a Jerusalén; allí adoraban junto conmigo, y nunca se apartaron del buen camino. Tus hermanos son hombres de bien y tú eres de buena estirpe. ¡Sé bienvenido!". (Tobías 5, 14)
Edna, por su parte, dijo a Tobías: "Hijo y hermano muy querido, quiera el Señor que vuelvas, y que yo tenga vida para ver a tus hijos y a los de mi hija Sara antes de morir. En presencia del Señor, te confío a mi hija para que la cuides. No la entristezcas ni un solo día de tu vida. Vete en paz, hijo mío. De ahora en adelante, yo soy tu madre y Sara es tu hermana. ¡Ojalá pudiéramos ser igualmente felices todos los días de nuestra vida!". Luego besó a los dos y los dejó; partir llenos de alegría. (Tobías 10, 13)
Pero no hemos querido molestarlos, ni a ustedes ni a nuestros otros aliados y amigos, con motivo de estas guerras, (I Macabeos 12, 14)
"Tú, Señor de todas las cosas, que no necesitas de nada, has querido que el Santuario donde tú habitas estuviera en medio de nosotros. (II Macabeos 14, 35)
porque el Señor reprende a los que ama como un padre a su hijo muy querido. (Proverbios 3, 12)