Znaleziono 2230 Wyniki dla: todo es vanidad

  • Pensando en esto, rogamos constantemente por ustedes a fin de que Dios los haga dignos de su llamado, y lleve a término en ustedes, con su poder, todo buen propósito y toda acción inspirada en la fe. (II Tesalonicenses 1, 11)

  • el Adversario, el que se alza con soberbia contra todo lo que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta llegar a instalarse en el Templo de Dios, presentándose como si fuera Dios. (II Tesalonicenses 2, 4)

  • Les ordenamos, hermanos, en nombre de nuestro Señor Jesucristo, que se aparten de todo hermano que lleve una vida ociosa, contrariamente a la enseñanza que recibieron de nosotros. (II Tesalonicenses 3, 6)

  • Ahora, sin embargo, nos enteramos de que algunos de ustedes viven ociosamente, no haciendo nada y entrometiéndose en todo. (II Tesalonicenses 3, 11)

  • los impúdicos y pervertidos, los traficantes de seres humanos, los tramposos y los perjuros. En una palabra, la Ley está contra todo lo que se opone a la sana doctrina (I Timoteo 1, 10)

  • Ante todo, te recomiendo que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos los hombres, (I Timoteo 2, 1)

  • Que las mujeres escuchen la instrucción en silencio, con todo respeto. (I Timoteo 2, 11)

  • Que las mujeres sean igualmente dignas, discretas para hablar de los demás, sobrias y fieles en todo. (I Timoteo 3, 11)

  • Todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada es despreciable, si se lo recibe con acción de gracias, (I Timoteo 4, 4)

  • Si explicas todo esto a los hermanos, serás un buen servidor de Cristo Jesús, alimentado por las enseñanzas de la fe y de la buena doctrina que siempre seguiste fielmente. (I Timoteo 4, 6)

  • Los ejercicios físicos son de poca utilidad; la piedad, en cambio, es útil para todo, porque encierra una promesa de Vida para el presente y para el futuro. (I Timoteo 4, 8)

  • el que no se ocupa de los suyos, sobre todo si conviven con él, ha renegado de su fe y es peor que un infiel. (I Timoteo 5, 8)


“Jesus vê, conhece e pesa todas as suas ações.” São Padre Pio de Pietrelcina