Znaleziono 352 Wyniki dla: voz

  • Entonces Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Iehosadac, el Sumo Sacerdote, y todo el resto del pueblo escucharon la voz del Señor, su Dios, y las palabras del profeta Ageo, según la misión que el Señor, su Dios, le había encomendado. Y el pueblo sintió temor en la presencia del Señor. (Ageo 1, 12)

  • Entonces los que están lejos vendrán y reconstruirán el Santuario del Señor. Así sabrán que me envió a ustedes el Señor de los ejércitos. Esto sucederá si escuchan verdaderamente la voz del Señor, su Dios. (Zacarías 6, 15)

  • En Ramá se oyó una voz, hubo lágrimas y gemidos: es Raquel, que llora a sus hijos y no quiere que la consuelen, porque ya no existen. (Mateo 2, 18)

  • A él se refería el profeta Isaías cuando dijo: Una voz grita en el desierto: Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos. (Mateo 3, 3)

  • Y se oyó una voz del cielo que decía: «Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta toda mi predilección». (Mateo 3, 17)

  • No discutirá ni gritará, y nadie oirá su voz en las plazas. (Mateo 12, 19)

  • Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y se oyó una voz que decía desde la nube: «Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo». (Mateo 17, 5)

  • Hacia las tres de la tarde, Jesús exclamó en alta voz: «Elí, Elí, lemá sabactani»,que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?». (Mateo 27, 46)

  • Entonces Jesús, clamando otra vez con voz potente, entregó su espíritu. (Mateo 27, 50)

  • Una voz grita en el desierto: Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos, (Marcos 1, 3)

  • y una voz desde el cielo dijo: «Tú eres mi Hijo muy querido, en ti tengo puesta toda mi predilección». (Marcos 1, 11)

  • Entonces una nube los cubrió con su sombra, y salió de ella una voz: «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo». (Marcos 9, 7)


“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina