Znaleziono 61 Wyniki dla: Ganados

  • Zabad, su hijo; Sutélaj, su hijo; Ezer y Elad. Pero los hombres de Gat, nacidos en el país, los mataron, pues habían bajado a apoderarse de sus ganados. (I Crónicas 7, 21)

  • Construyó también torres en el desierto y excavó muchas cisternas, pues poseía numerosos ganados en la Tierra Baja y en la llanura, así como labradores y viñadores en las montañas y en los campos fértiles, porque le gustaba la agricultura. (II Crónicas 26, 10)

  • Sus muchos frutos son para los reyes, que por nuestros pecados tú nos impusiste, y que a capricho dominan nuestras personas, cuerpos y ganados. ¡En gran angustia nos hallamos! (Nehemías 9, 37)

  • y ellos, sus mujeres, sus hijos y sus ganados, los forasteros residentes, los jornaleros y los esclavos, se ciñeron de sayal. (Judit 4, 10)

  • Era muy bella y muy bien parecida. Su marido Manasés le había dejado oro y plata, siervos y siervas, ganados y campos, quedando ella como dueña, (Judit 8, 7)

  • ¡Viva Nabucodonosor, rey de toda la tierra y viva su poder que te ha enviado para poner en el recto camino a todo viviente!; porque gracias a ti no le sirven tan sólo los hombres, sino que, por medio de tu fuerza, hasta las fieras salvajes, los ganados y las aves del cielo viven para Nabucodonosor y para toda su casa. (Judit 11, 7)

  • En vista de que se les acaban los víveres y escasea el agua, han deliberado echar mano de sus ganados y están ya decididos a consumir todo aquello que su Dios, por sus leyes, les ha prohibido comer. (Judit 11, 12)

  • entregó sus ganados al pedrisco y a los rayos sus rebaños. (Salmos 78, 48)

  • El los bendice y crecen mucho y no deja que mengüen sus ganados. (Salmos 107, 38)

  • fieras y todos los ganados, reptil y pájaro que vuela, (Salmos 148, 10)

  • con sus mujeres, sus hijos y sus ganados, porque los males duramente les oprimían. (I Macabeos 2, 30)

  • Les atacaron, pues, en sábado y murieron ellos, sus mujeres, hijos y ganados: unas mil personas. (I Macabeos 2, 38)


“Somente por meio de Jesus podemos esperar a salvação.” São Padre Pio de Pietrelcina