Znaleziono 39 Wyniki dla: muera

  • Caiga sobre la cabeza de Joab y sobre toda la casa de su padre, nunca falte en la casa de Joab quien padezca flujo de sangre, ni leproso, ni quien ande con cachava, ni quien muera a espada, ni quien carezca de pan.» (II Samuel 3, 29)

  • En la carta había escrito: «Poned a Urías frente a lo más reñido de la batalla y retiraos de detrás de él para que sea herido y muera.» (II Samuel 11, 15)

  • Después que le hubo sepultado, dijo a sus hijos: «Cuando yo muera, me sepultaréis en el sepulcro en que ha sido sepultado el hombre de Dios; junto a sus huesos depositaréis mis huesos, (I Reyes 13, 31)

  • Haced que se sienten frente a él dos malvados que le acusarán diciendo: "Has maldecido a Dios y al rey" y le sacaréis y le apedrearéis para que muera.» (I Reyes 21, 10)

  • Llamó, pues, Tobit a su hijo, que se presentó ante él. Tobit le dijo: «Cuando yo muera, me darás una digna sepultura; honra a tu madre y no le des un disgusto en todos los días de su vida; haz lo que le agrade y no le causes tristeza por ningún motivo. (Tobías 4, 3)

  • Acuérdate, hijo, de que ella pasó muchos trabajos por ti cuando te llevaba en su seno. Y cuando ella muera, sepúltata junto a mí, en el mismo sepulcro. (Tobías 4, 4)

  • El justo, aunque muera prematuramente, halla el descanso. (Sabiduría 4, 7)

  • Ahora, pues, oiga el rey mi señor, caiga bien en tu presencia mi petición de gracia y no me vuelvas a casa del escriba Jonatán, no muera yo allí.» (Jeremías 37, 20)

  • Entonces ordenó el rey a Ebed Mélek el kusita: «Toma tú mismo de aquí treinta hombres, y subes al profeta Jeremías del pozo antes de que muera.» (Jeremías 38, 10)

  • Entonces dije: «¡No os apacentaré más; la que tenga que morir, que muera, la que tenga que desaparecer, que desaparezca, y las que queden, que se coman unas a otras!» (Zacarías 11, 9)

  • Le dice el funcionario: «Señor, baja antes que se muera mi hijo.» (Juan 4, 49)

  • este es el pan que baja del cielo, para que quien lo coma no muera. (Juan 6, 50)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina