Znaleziono 84 Wyniki dla: Libre

  • No hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay hombre ni mujer, pues todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. (Gálatas 3, 28)

  • En ella se dice: Abrahán tuvo dos hijos: uno de la esclava y otro de la libre. (Gálatas 4, 22)

  • Pero el de la esclava nació de modo natural; el de la libre, sin embargo, en virtud de la promesa. (Gálatas 4, 23)

  • Pero la Jerusalén de arriba es libre, la cual es madre nuestra, (Gálatas 4, 26)

  • Pero ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo, pues el hijo de la esclava no será heredero con el hijo de la libre. (Gálatas 4, 30)

  • Por consiguiente, hermanos, no somos hijos de la esclava, sino de la libre. (Gálatas 4, 31)

  • En Cristo también hemos sido hechos herederos, predestinados según el designio del que todo lo hace conforme a su libre voluntad, (Efesios 1, 11)

  • considerando que el Señor retribuirá a cada uno todo el bien que haga, lo mismo al esclavo que al libre. (Efesios 6, 8)

  • Ya no hay distinción entre griego y judío, circunciso o incircunciso, extranjero o ignorante, esclavo o libre, sino que Cristo es todo en todos. (Colosenses 3, 11)

  • con la esperanza de que su Hijo Jesús, al que él resucitó de entre los muertos, vuelva del cielo y nos libre del desastre inminente. (I Tesalonicenses 1, 10)

  • Quien se conserve libre de estos errores será un utensilio para usos nobles, santificado, útil a su dueño, dispuesto siempre a hacer el bien. (II Timoteo 2, 21)

  • El sexto vertió su copa sobre el río grande, el Éufrates, y sus aguas se secaron, dejando paso libre a los reyes del oriente. (Apocalipsis 16, 12)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina