Znaleziono 526 Wyniki dla: Palabras

  • Con esto están de acuerdo las palabras de los profetas, según está escrito: (Hechos 15, 15)

  • Nos hemos enterado de que algunos de los nuestros, sin nuestro mandato, os han inquietado y alarmado con sus palabras. (Hechos 15, 24)

  • pero si es cuestión de palabras y nombres y cosas de vuestra ley, allá vosotros; yo no quiero ser juez de estos asuntos". (Hechos 18, 15)

  • y se despidió con estas palabras: "Volveré de nuevo, si Dios quiere". (Hechos 18, 21)

  • En todo os he mostrado que se debe trabajar así para socorrer a los necesitados, recordando las palabras de Jesús, el Señor: "Hay más felicidad en dar que en recibir". (Hechos 20, 35)

  • Pablo dijo: "No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que pronuncio palabras de verdad y de sensatez. (Hechos 26, 25)

  • Al despedirse sin ponerse de acuerdo unos con otros, Pablo terminó con estas palabras: "Con razón dijo el Espíritu Santo a vuestros padres por medio del profeta Isaías: (Hechos 28, 25)

  • ¡Nunca jamás! Pues es necesario reconocer que Dios es leal y los hombres desleales, como dice la Escritura: Tus palabras demostrarán que eres inocente y saldrás vencedor en el juicio. (Romanos 3, 4)

  • Yo pregunto: ¿Es que no han oído? Sí, lo han oído. Porque dice la Escritura: Por toda la tierra se extendió su voz, y hasta los confines del mundo llegaron sus palabras. (Romanos 10, 18)

  • No me atrevería a hablar de alguna cosa que Cristo no hubiera hecho por medio de mi ministerio para conseguir que los paganos aceptaran el evangelio. Esto se ha conseguido con palabras y acciones, (Romanos 15, 18)

  • porque ésos no sirven a Cristo nuestro Señor, sino a su estómago, y con palabras dulces y agradables engañan a la gente sencilla. (Romanos 16, 18)

  • Así también vosotros, si vuestra lengua no utiliza palabras claras, ¿cómo se entenderá lo que decís? Sería como hablar al aire. (I Corintios 14, 9)


“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina