Znaleziono 134 Wyniki dla: alto

  • Participad en la instrucción con un alto precio y adquiriréis por ella mucho oro. (Eclesiástico 51, 28)

  • Y vagará por el país, abatido y hambriento; por el hambre se desesperará y maldecirá a su rey y a su Dios. Levantará sus ojos a lo alto, (Isaías 8, 21)

  • que se está haciendo un sepulcro en lo alto y tallando en la roca su mansión: ¿Qué tienes aquí; a quién conoces para excavarte aquí un sepulcro? (Isaías 22, 16)

  • Aquel día el Señor visitará a las milicias del cielo allá en lo alto; y aquí abajo, a los reyes de la tierra. (Isaías 24, 21)

  • Sí, él ha humillado a los que habitaban en lo alto; ha abatido la ciudadela escarpada, la ha abatido a tierra, la ha derribado en el polvo: (Isaías 26, 5)

  • En todo monte alto y en toda colina elevada habrá arroyos y corrientes de agua el día de la gran matanza, cuando caigan las torres. (Isaías 30, 25)

  • Hasta que sobre nosotros se derrame el espíritu venido de lo alto: entonces el desierto se trocará en vergel y el vergel se cambiará en selva. (Isaías 32, 15)

  • Pío como la golondrina, gimo como la paloma. Se consumen mis ojos de mirar a lo alto. Señor, en angustia estoy; sé tú mi valedor. (Isaías 38, 14)

  • Sube a un monte alto, mensajero de albricias de Sión, haz resonar fuertemente tu voz, mensajero de albricias de Jerusalén. Hazla resonar sin miedo: di a las ciudades de Judá: ¡Aquí está vuestro Dios! (Isaías 40, 9)

  • Alzad los ojos a lo alto y mirad: ¿Quién ha creado todos estos astros, sino el que despliega en orden sus mesnadas y llama a cada uno por su nombre? Tanta es su fuerza, tan grande su poder que ninguno falta a su llamada. (Isaías 40, 26)

  • ¿Por qué dices, Jacob, y afirmas tú, Israel: Mi suerte está oculta al Señor, a Dios se le pasa por alto mi derecho? (Isaías 40, 27)

  • Alcen su voz el desierto y sus ciudades, las aldeas en que habita Quedar; aclamen los habitantes de Petra, desde lo alto de los montes lancen gritos. (Isaías 42, 11)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina