Znaleziono 331 Wyniki dla: lista de pueblos

  • En aquel día yo me pondré a aniquilar a todos los pueblos que vinieron contra Jerusalén. (Zacarías 12, 9)

  • Ésta será la plaga con la que el Señor castigará a todos los pueblos que lucharon contra Jerusalén: se les pudrirán sus carnes estando aún en pie, sus ojos se pudrirán en sus órbitas, su lengua se pudrirá en su boca. (Zacarías 14, 12)

  • También Judá luchará con Jerusalén. Las riquezas de todos los pueblos de alrededor serán reunidas: oro, plata y vestidos en gran cantidad. (Zacarías 14, 14)

  • Todos los supervivientes de todos los pueblos que vinieron a luchar contra Jerusalén irán año tras año a adorar al rey, al Señor todopoderoso, y a celebrar la fiesta de los tabernáculos. (Zacarías 14, 16)

  • Cuando Jesús acabó de dar estas instrucciones a sus doce discípulos, se fue de allí para enseñar y predicar en aquellos pueblos. (Mateo 11, 1)

  • Se levantarán pueblos contra pueblos y reinos contra reinos; habrá hambre y terremotos en diversos lugares. (Mateo 24, 7)

  • Entonces os entregarán a la tortura y a la muerte. Por mi causa os odiarán todos los pueblos. (Mateo 24, 9)

  • Todos los pueblos serán llevados a su presencia; y él separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de las cabras. (Mateo 25, 32)

  • Id, pues, y haced discípulos míos en todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, (Mateo 28, 19)

  • Él les dijo: "Vamos a otra parte, a los pueblos vecinos, a predicar también allí, pues para eso he salido". (Marcos 1, 38)

  • Se levantarán pueblos contra pueblos y reinos contra reinos; habrá hambre y terremotos por diversos lugares. Eso será el comienzo de los dolores. (Marcos 13, 8)

  • Pero antes de todo, el evangelio será predicado a todos los pueblos. (Marcos 13, 10)


“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina