Znaleziono 351 Wyniki dla: persecución de Saúl
Abner se indignó mucho por estas palabras de Isbaal, y le dijo: "¿Soy yo, acaso, una cabeza de perro? Yo he tenido piedad de la casa de Saúl, con sus hermanos y sus amigos, y no te he dejado caer en manos de David; ¿y ahora me recriminas por una mujer? (II Samuel 3, 8)
quitar el reino a la casa de Saúl y establecer el trono de David sobre Israel y sobre Judá desde Dan hasta Berseba". (II Samuel 3, 10)
David respondió: "Bien, yo haré un pacto contigo; pero exijo de ti una sola cosa: no serás admitido ante mí si no me traes a Mical, hija de Saúl, cuando vengas a verme". (II Samuel 3, 13)
David envió mensajeros a Isbaal, hijo de Saúl, para decirle: "Devuélveme a mi mujer, Mical, que yo adquirí por cien prepucios de filisteos". (II Samuel 3, 14)
Joab, al salir de estar con David, envió mensajeros en persecución de Abner, que le hicieron volver desde la cisterna de Sirá, sin saberlo David. (II Samuel 3, 26)
Cuando Isbaal, hijo de Saúl, supo que Abner había muerto en Hebrón, se quedó sin aliento, y todo Israel quedó consternado. (II Samuel 4, 1)
Isbaal, hijo de Saúl, tenía dos hombres, jefes de banda, Baaná y Recab. Eran hijos de Rimón de Beerot, de los hijos de Benjamín, pues también Beerot era considerado de Benjamín. (II Samuel 4, 2)
Jonatán, hijo de Saúl, tenía un hijo cojo. Tenía cinco años cuando llegó de Yezrael la noticia sobre Saúl y Jonatán. Su nodriza le tomó para huir con él, pero en la precipitación de la fuga cayó y quedó cojo. Se llamaba Meribaal. (II Samuel 4, 4)
Llevaron la cabeza de Isbaal a David, a Hebrón, y dijeron al rey: "Aquí tienes la cabeza de Isbaal, hijo de Saúl, tu enemigo, que buscaba tu ruina. El Señor ha vengado hoy a mi señor, el rey, de Saúl y de su descendencia". (II Samuel 4, 8)
que si al que me anunció la muerte de Saúl creyendo que me daba una buena noticia, yo lo agarré y lo maté en Sicelag en lugar de darle una recompensa, (II Samuel 4, 10)
Ya antes, cuando todavía reinaba Saúl, eras tú el que mandaba el ejército de Israel. El Señor te había dicho: Tú apacentarás a mi pueblo Israel, serás el jefe de mi pueblo Israel". (II Samuel 5, 2)
Cuando el arca del Señor llegó a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, estaba mirando por la ventana y, al ver al rey David saltando y bailando, lo despreció en su corazón. (II Samuel 6, 16)