14. Pero Oholibá fue más lejos todavía con sus prostituciones: vio unos hombres esculpidos en el muro, imágenes de caldeos pintadas de rojo,





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina