I Pedro, 3

21. Todo esto es figura del bautismo, por el que ahora ustedes son salvados, el cual no consiste en la supresión de una mancha corporal, sino que es el compromiso con Dios de una conciencia pura, por la resurrección de Jesucristo,

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El Capítulo 3 de la primera epístola de San Pedro habla sobre la conducta que los cristianos deben tener en sus relaciones interpersonales, especialmente en relación con sus cónyuges y otros hermanos en la fe. El texto destaca la importancia de la humildad, el amor, la paciencia y la bondad en la construcción de relaciones saludables. Además, el capítulo también menciona el ejemplo de Cristo como un modelo de comportamiento seguido por los cristianos.

Proverbios 15:1: "La respuesta leve desvía el furor, pero la palabra dura aumenta la ira". Este versículo destaca la importancia de ser pacientes y leves en nuestras relaciones interpersonales, especialmente cuando se trata de situaciones tensas. Esta actitud puede ayudar a evitar conflictos y promover la paz entre las personas.

Efesios 4:2: "Completa mi alegría, para que pienses lo mismo, ten el mismo amor, estén unidos en el alma, teniendo el mismo sentimiento". Aquí, el apóstol Pablo insta a los cristianos a unirse y a pensar y actuar de manera similar. Esto es importante para construir relaciones saludables y promover la armonía en la iglesia.

1 Corintios 13:4-7: "El amor es paciente, es benigno; el amor no se quema en los celos, no ufan, no se enseña a sí mismo, no conduce inconvenientemente, no busque sus intereses, no exasperales, no resenten de malvado; no se regocija con la injusticia, sino que se regocija con la verdad ". En estos versículos, Paul presenta una descripción del verdadero amor. Este tipo de amor es fundamental para la construcción de relaciones saludables, no solo entre los cónyuges, sino también entre los hermanos en la fe.

Romanos 12:18: "Si es posible, cuánto depende de ti, tiende a la paz con todos los hombres". El apóstol Pablo insta a los cristianos a hacer todo lo posible para mantener la paz con las personas que los rodean. Esta es una actitud fundamental para la promoción de la armonía y el bienestar de las personas en nuestra sociedad.