I Samuel, 17
22. Entonces David dejó las cosas que traía en manos del encargado del equipaje, corrió hacia las filas y fue a saludar a sus hermanos.
22. Entonces David dejó las cosas que traía en manos del encargado del equipaje, corrió hacia las filas y fue a saludar a sus hermanos.
“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina