11. Luego Elcaná se fue a su casa en Ramá, y el niño quedó al servicio del Señor, a las órdenes del sacerdote Elí.





“Diga ao Senhor: Faça em mim segundo a Tua vontade, mas antes de mandar-me o sofrimento, dê-me forças para que eu possa sofrer com amor.”. São Padre Pio de Pietrelcina