12. Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Yehosadaq, sumo sacerdote, y todo el Resto del pueblo escucharon la voz de Yahveh, su Dios, y las palabras del profeto Ageo, según la misión que Yahveh su Dios le había encomendado, y temió el pueblo delante de Yahveh.





“Devo fazer somente a vontade de Deus e, se lhe agrado, o restante não conta.” São Padre Pio de Pietrelcina