3. Baru leyó el texto de este libro a oídos de Jeconías, hijo de Yoyaquim, rey de Judá, y a oídos de todo el pueblo venido para escuchar el libro;





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina