22. Extendió, pues, Moisés su mano hacia el cielo, y hubo por tres días densas tinieblas en todo el país de Egipto.





“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina