Ester, 15
5. Radiante de hermosura, invocó a Dios, árbitro y salvador de todos, y tomó consigo dos doncellas.
5. Radiante de hermosura, invocó a Dios, árbitro y salvador de todos, y tomó consigo dos doncellas.
“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina