34. Si queda para el día siguiente algo de carne del sacrificio de investidura o de los panes, lo quemas en el fuego; no se comerá, porque es cosa santa.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina