Ezequiel, 21
17. Grita, aúlla, hijo de hombre, porque está destinada a mi pueblo, todos los príncipes de Israel, entregados a la espada junto con mi pueblo. Hiérete las caderas,
17. Grita, aúlla, hijo de hombre, porque está destinada a mi pueblo, todos los príncipes de Israel, entregados a la espada junto con mi pueblo. Hiérete las caderas,
“Nossa Senhora está sempre pronta a nos socorrer, mas por acaso o mundo a escuta e se emenda?” São Padre Pio de Pietrelcina