20. Elí bendecía a Elcaná y a su mujer, diciendo: "Que el Señor te dé descendencia de esta mujer en lugar del que ella ha ofrecido al Señor". Y ellos se volvían a su casa.





“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina