2. Pasaron veinte años desde el día en que instalaron el arca del Señor en Quiriat Yearín, y toda la casa de Israel se lamentaba ante el Señor.





“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina