Job, 2
10. Pero él respondió: "Hablas como una mujer necia. Si se acepta de Dios el bien, ¿no se ha de aceptar el mal?". En todo esto no pecó Job con sus labios.
10. Pero él respondió: "Hablas como una mujer necia. Si se acepta de Dios el bien, ¿no se ha de aceptar el mal?". En todo esto no pecó Job con sus labios.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina