8. Pues tú sabes que tu padre y sus hombres son gente decidida y están envalentonados como si a una osa en el campo le quitaran su cría. Tu padre sabe mucho de guerra y no se queda a descansar de noche con sus tropas.





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina