Sirácides (Eclesiástico), 38
22. Acuérdate de mi sentencia que un día podrás repetir: ¡ayer fue yo, hoy serás tú!
22. Acuérdate de mi sentencia que un día podrás repetir: ¡ayer fue yo, hoy serás tú!
“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina