Encontrados 115 resultados para: Altísimo
Al Altísimo no le agradan las ofrendas de los impíos; sus pecados no serán perdonados a fuerza de sacrificios. (Sirácides (Eclesiástico) 34, 19)
Cuando el justo presenta su ofrenda, la grasa es para el altar, pero el buen olor sube hasta el Altísimo. (Sirácides (Eclesiástico) 35, 5)
Da al Altísimo como te ha dado, de todo corazón y según tus medios; (Sirácides (Eclesiástico) 35, 9)
No se desistirá, será necesario que el Altísimo se ocupe de él, que el Señor intervenga en favor de los justos. (Sirácides (Eclesiástico) 35, 18)
Pero sobre todo invoca al Altísimo para que te guíe en la verdad. (Sirácides (Eclesiástico) 37, 15)
La mejoría viene del Altísimo, y es el Rey quien concede el don de sanar. (Sirácides (Eclesiástico) 38, 2)
Pasa todo lo contrario con el que se aplica a meditar la Ley del Altísimo. Escudriña la sabiduría de los antiguos y las profecías de éstos le absorben todo el tiempo. (Sirácides (Eclesiástico) 39, 1)
Desde temprano se dedica a encontrar al Señor que lo creó, implora en presencia del Altísimo; abre su boca para orar y suplicar por sus pecados. (Sirácides (Eclesiástico) 39, 5)
El Señor la decretó para todo ser viviente: ¿rehusarás algo que le pareció bueno al Altísimo? Ya sea que hayas vivido diez, cien o mil años, a nadie le importarará eso en la Morada de abajo. (Sirácides (Eclesiástico) 41, 4)
Ay de ustedes, hombres malvados, que abandonaron la ley del Altísimo. (Sirácides (Eclesiástico) 41, 8)
de la ley del Altísimo y de su Alianza, de reconocer la inocencia, aun la del malvado, (Sirácides (Eclesiástico) 42, 2)
El sondea tanto los abismos del mar como los espíritus de los hombres; él ve claro en sus proyectos. El Altísimo conoce todo lo que se puede saber: conoce los signos de los tiempos. (Sirácides (Eclesiástico) 42, 18)