Encontrados 115 resultados para: Altísimo

  • Desde que el sol aparece va proclamando: "¡Soy un objeto admirable, una obra del Altísimo!" (Sirácides (Eclesiástico) 43, 2)

  • Traza en el cielo un círculo de gloria, un arco que fue extendido por las manos del Altísimo. (Sirácides (Eclesiástico) 43, 12)

  • Es un Señor temible y altísimo, su poder es prodigioso. (Sirácides (Eclesiástico) 43, 29)

  • Observó la ley del Altísimo, que lo hizo entrar en su alianza; esa alianza fue inscrita en su carne; permaneció fiel en el día de la prueba. (Sirácides (Eclesiástico) 44, 20)

  • Invocó al Altísimo, al Poderoso, cuando sus enemigos lo atacaban por todas partes, y el Amo supremo lo escuchó haciendo llover tremendos granizos. (Sirácides (Eclesiástico) 46, 5)

  • Había clamado al Señor, al Altísimo, y éste le dio a su brazo la fuerza para acabar con ese terrible combatiente; así le dio la victoria a su pueblo. (Sirácides (Eclesiástico) 47, 5)

  • Después de tantas hazañas, David rindió homenaje al Santo, al Altísimo, con cánticos de alanbanz; le entonó himnos con todo su corazón; se sentía contento por lo que le había hecho. (Sirácides (Eclesiástico) 47, 8)

  • A una sola palabra del Altísimo, hiciste que un muerto se levantara, arrancándolo del mundo de los muertos, de la Morada de abajo. (Sirácides (Eclesiástico) 48, 5)

  • Fuera de David, Ezequías y Josías, todos los demás no hicieron más que multiplicar sus pecados. Los reyes de Judá abandonaron la ley del Altísimo y por eso fueron abandonados. (Sirácides (Eclesiástico) 49, 4)

  • como el sol que ilumina el Templo del Altísimo, como el arco iris cuya luz transfigura las nubes; (Sirácides (Eclesiástico) 50, 7)

  • Simón ejecutaba en el altar los ritos litúrgicos y presentaba con gran dignidad la ofrenda al Altísimo, al Todopoderoso. (Sirácides (Eclesiástico) 50, 14)

  • Tomando la copa de vino, dejaba que corriera suavemnte el jugo de la uva al pie del altar, como perfume agradable para el Altísimo, el Rey del universo. (Sirácides (Eclesiástico) 50, 15)


“A maior alegria de um pai é que os filhos se amem, formem um só coração e uma só alma. Não fostes vós que me escolhestes, mas o pai celeste que, na minha primeira missa, me fez ver todos os filhos que me confiava”.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina