Encontrados 75 resultados para: descanso
Yavé respondió: «Ve y haz lo que te diga, que yo te llevaré al descanso.» (Exodo 33, 14)
Trabajarás durante seis días, pero el día séptimo será sagrado para ustedes, día de descanso completo en honor a Yavé. Cualquiera que trabaje en ese día morirá. (Exodo 35, 2)
Habrá seis días trabajados, y el séptimo día será sábado de descanso con una asamblea santa: no se hará ningún trabajo. El sábado será para Yavé en todos los lugares donde vivan. (Levítico 23, 3)
«Di a los hijos de Israel: Cuando hayan entrado en el país que les voy a dar, la tierra tendrá su descanso el año séptimo en honor a Yavé. (Levítico 25, 2)
pero el séptimo año será un sábado, un descanso solemne para la tierra, un sábado en honor de Yavé. No sembrarás tu campo ni podarás tu viña; (Levítico 25, 4)
tampoco segarás los rebrotes de la última cosecha, ni vendimiarás los racimos de tu viña sin cultivar: será un año de descanso completo para la tierra. (Levítico 25, 5)
Lo que produzca naturalmente la tierra durante su descanso, servirá de comida a ti, a tu siervo y a tu sierva, a tu jornalero y al extranjero que vive junto a ti. (Levítico 25, 6)
En cuanto Yavé haya dado a sus hermanos un lugar de descanso, como ya hizo para ustedes, y se hayan adueñado de la tierra que les daré al otro lado del Jordán, entonces cada uno de ustedes volverá aquí a la heredad que les he dado . (Deuteronomio 3, 20)
Pero el día séptimo es el Descanso en honor de Yavé, tu Dios. No harás ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu servidor, ni tu sirvienta, ni tu buey, ni tu burro u otro de tus animales. Tampoco trabajará el extranjero que está en tu país. Tu servidor y tu sirvienta descansarán así como tú, (Deuteronomio 5, 14)
porque todavía no hemos llegado al lugar del descanso, al país que Yavé nos da. (Deuteronomio 12, 9)
Por eso, cuando Yavé, tu Dios, después de someter a todos tus enemigos alrededor, te dé descanso en la tierra que él te da, borrarás el recuerdo de Amalec de debajo de los cielos. No lo olvides. (Deuteronomio 25, 19)
Josué se apoderó de todo el país, como Yavé se lo había dicho a Moisés, y se lo entregó en herencia a los israelitas para que lo repartieran entre sus tribus. Con esto el país descansó de la guerra. (Josué 11, 23)