Encontrados 266 resultados para: justo

  • Al contrario, que reciba con facilidad en su casa, que sea amigo del bien, hombre de buen juicio, justo, piadoso, dueño de sí mismo. (Carta a Tito 1, 8)

  • Mi justo, si cree, vivirá; pero si desconfía, ya no lo miraré con amor. (Carta a los Hebreos 10, 38)

  • Por la fe de Abel, su sacrificio fue mejor que el de su hermano Caín. Por eso fue considerado justo, como Dios lo dio a entender aprobando sus ofrendas. Y aun después de muerto, por su fe sigue clamando. (Carta a los Hebreos 11, 4)

  • Abrahán, nuestro padre, ¿no fue reconocido justo por sus obras, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? (Carta de Santiago 2, 21)

  • Esto es lo que recuerda la Escritura: Abrahán creyó en Dios, y por eso fue reconocido justo, y fue llamado amigo de Dios. (Carta de Santiago 2, 23)

  • Reconozcan sus pecados unos ante otros y recen unos por otros para que sean sanados. La súplica del justo tiene mucho poder con tal de que sea perseverante: (Carta de Santiago 5, 16)

  • Pues Cristo quiso morir por el pecado y para llevarnos a Dios, siendo esta la muerte del justo por los injustos. Murió por ser carne, y luego resucitó por el Espíritu. (1º Carta de Pedro 3, 18)

  • Si el justo se salva a duras penas, ¿dónde se presentarán el pecador y el impío? (1º Carta de Pedro 4, 18)

  • Pero si confesamos nuestros pecados, él, que es fiel y justo, nos perdonará nuestros pecados y nos limpiará de toda maldad. (1º Carta de Juan 1, 9)

  • Hijitos míos, les he escrito esto para que no pequen; pero si uno peca, tenemos un defensor ante el Padre, Jesucristo, el Justo. (1º Carta de Juan 2, 1)

  • Si saben que él es el Justo, reconozcan que todo el que practica la justicia ha nacido de Dios. (1º Carta de Juan 2, 29)

  • Hijitos míos, no se dejen extraviar: el que actúa con toda rectitud es justo como él es justo. (1º Carta de Juan 3, 7)


“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina