Encontrados 37 resultados para: montón

  • Para pagar su instrucción no sería suficiente un montón de plata; con ella, en cambio, tendrán oro en abundancia. (Sirácides (Eclesiástico) 51, 28)

  • Oráculo contra Damasco. Damasco ya no será más una ciudad, sino un montón de escombros. (Isaías 17, 1)

  • Has hecho de la ciudad un montón de escombros, y de la fortaleza una ruina; el bastión de los extranjeros ya no es una ciudad, y nadie la reconstruirá. (Isaías 25, 2)

  • pues la mano de Yavé se nota en este cerro.» Moab, en cambio, será pisoteado como se pisotea la paja en un montón de guano, (Isaías 25, 10)

  • «Voy a hacer de Jerusalén un montón de piedras, una guarida de chacales, y de las ciudades de Judá, un desierto donde nadie viva.» (Jeremías 9, 10)

  • «Miqueas de Morasti, que profetizaba en tiempos de Ezequías, rey de Judá, dijo también públicamente: «Sión llegará a ser un campo arado, Jerusalén se convertirá en un montón de ruinas, el cerro de la Casa de Yavé no será más que una colina abandonada.» (Jeremías 26, 18)

  • No les presten atención, sino que obedezcan al rey de Babilonia y vivirán; pues, ¿quieren que esta ciudad se convierta en un montón de ruinas? (Jeremías 27, 17)

  • Así dice Yavé de los Ejércitos, el Dios de Israel. Ustedes han presenciado todas las desgracias que sufrieron Jerusalén y todas las ciudades de Judá, que hoy no son más que un montón de ruinas abandonadas. (Jeremías 44, 2)

  • Entonces mi furor y mi cólera estallaron y quemaron las ciudades de Judá y los barrios de Jerusalén reduciéndolas a un montón de ruinas abandonadas, como lo están hoy en día. (Jeremías 44, 6)

  • Prepara tu equipaje de desterrada, hija de Egipto, que vives tan cómodamente. Nof será reducida a un desierto, a un montón de ruinas abandonadas. (Jeremías 46, 19)

  • Por eso, se acerca ya el tiempo, dice Yavé, en que haré resonar, en Rabbá de los amonitas, el grito de guerra. Quedará convertida en un montón de escombros abandonados y sus aldeas serán incendiadas. Entonces Israel despojará a los que lo habían despojado, afirma Yavé. (Jeremías 49, 2)

  • Pues yo lo juré por mí mismo -dice Yavé-: Bosra quedará convertida en un desierto espantoso, infame y maldito, y todas sus ciudades no serán, en adelante, más que un montón de ruinas. (Jeremías 49, 13)


“Nossa Senhora está sempre pronta a nos socorrer, mas por acaso o mundo a escuta e se emenda?” São Padre Pio de Pietrelcina