Encontrados 223 resultados para: pies

  • En eso Jesús les salió al encuentro en el camino y les dijo: «Paz a ustedes.» Las mujeres se acercaron, se abrazaron a sus pies y lo adoraron. (Evangelio según San Mateo 28, 9)

  • Incluso los espíritus malos, apenas lo veían, se arrojaban a sus pies y gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios.» (Evangelio según San Marcos 3, 11)

  • Al divisar a Jesús, fue corriendo y se echó de rodillas a sus pies. (Evangelio según San Marcos 5, 6)

  • En eso llegó un oficial de la sinagoga, llamado Jairo, y al ver a Jesús, se postró a sus pies (Evangelio según San Marcos 5, 22)

  • Y si en algún lugar no los reciben ni los escuchan, no se alejen de allí sin haber sacudido el polvo de sus pies: con esto darán testimonio contra ellos.» (Evangelio según San Marcos 6, 11)

  • Una mujer, cuya hija estaba en poder de un espíritu malo, se enteró de su venida y fue en seguida a arrodillarse a sus pies. (Evangelio según San Marcos 7, 25)

  • pues es mejor para ti entrar cojo en la vida que ser arrojado con los dos pies a la gehenna. (Evangelio según San Marcos 9, 45)

  • Porque el mismo David dijo, hablando por el Espíritu Santo: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies. (Evangelio según San Marcos 12, 36)

  • En aquel pueblo había una mujer conocida como una pecadora; al enterarse de que Jesús estaba comiendo en casa del fariseo, tomó un frasco de perfume, se colocó detrás de él, a sus pies, (Evangelio según San Lucas 7, 37)

  • y se puso a llorar. Sus lágrimas empezaron a regar los pies de Jesús y ella trató de secarlos con su cabello. Luego le besaba los pies y derramaba sobre ellos el perfume. (Evangelio según San Lucas 7, 38)

  • Y volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: «¿Ves a esta mujer? Cuando entré en tu casa, no me ofreciste agua para los pies, mientras que ella me ha lavado los pies con sus lágrimas y me los ha secado con sus cabellos. (Evangelio según San Lucas 7, 44)

  • Tú no me has recibido con un beso, pero ella, desde que entró, no ha dejado de cubrirme los pies de besos. (Evangelio según San Lucas 7, 45)


“Quando o dia seguinte chegar, ele também será chamado de hoje e, então, você pensará nele. Tenha sempre muita confiança na Divina Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina