Encontrados 100 resultados para: puro

  • Pero, cuando se haya puesto el sol, será puro y podrá comer de las cosas santas porque son su alimento. (Levítico 22, 7)

  • «Manda a los hijos de Israel que te traigan aceite puro de oliva molida, para el candelero, para mantener continuamente la luz encendida. (Levítico 24, 2)

  • El colocará las lámparas sobre el candelabro puro que permanece ante Yavé. (Levítico 24, 4)

  • Pondrás sobre cada fila incienso puro para que el pan sea un memorial, un sacrificio por el fuego para Yavé. (Levítico 24, 7)

  • En cambio el que, encontrándose puro y no estando de viaje deje de celebrar la Pascua, será eliminado de entre los suyos por no haber ofrecido a su tiempo la ofrenda de Yavé. Así pagará la pena de su pecado. (Números 9, 13)

  • Tuyo será también lo que se reserva de las ofrendas de los israelitas, de cualquier ofrenda mecida; te lo doy a ti, a tus hijos y a tus hijas como ley perpetua. Cualquiera que esté puro en tu casa, lo podrá comer. (Números 18, 11)

  • Te doy los primeros productos de la tierra que ellos lleven a Yavé. Cualquiera que esté puro en tu casa los podrá comer. (Números 18, 13)

  • Un hombre puro recogerá las cenizas de la vaca y las pondrá fuera del campamento en un lugar puro. Allí se las conservará para hacer el agua de purificación que usará la comunidad de los israelitas para hacer la expiación. (Números 19, 9)

  • Se purificará con esa agua el tercero y séptimo día, después de lo cual quedará puro. Pero si no se purifica al tercero y séptimo día, seguirá impuro. (Números 19, 12)

  • Luego un hombre puro tomará una ramita de hisopo, la sumergerá en el agua y rociará la tienda y a todos los objetos y personas que haya en ella; se hará lo mismo con el que tocó los huesos, al muerto o la tumba. (Números 19, 18)

  • El hombre puro rociará al que está impuro al tercero y séptimo día; el séptimo día este último hará la expiación. Lavará sus ropas y se bañará en agua, y a la tarde quedará puro. (Números 19, 19)

  • Harás la libación de vino puro, delante de Yavé en el lugar santo: un cuarto de sextario por cada cordero. (Números 28, 7)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina